Etapa 8: Gracac – Baske Ostarije

Como cada mañana, antes de ponerme en marcha reemplacé la pila de la maneta por una nueva, única forma de poder cambiar piñones durante unas horas.

La carretera tenía poco tráfico y transcurría entre montañas por lo que me encontraba con el ánimo muy subido, ese día estaba disfrutando mucho del paisaje.

Llegué a Gospic, una pequeña ciudad que, en 1856, pertenecía al Imperio Austriaco. Aquí nació Nikola Tesla de padres serbios. Ahora Gospic pertenece a Croacia y tiene un museo dedica a Tesla, donde descansan sus restos.

A media mañana me vi obligada a hacer un parón y cobijarme bajo una sombra a la espera de que se pasaran las peores horas del día.

Cuando retomé el camino, subí un puerto de unos 5 km que me llevó hasta el monte Velebit en la cordillera más grande de Croacia, en los Alpes Dináricos. Fui a parar por casualidad a un camping que encontré en mi camino y que resultó ser el sitio ideal para quedarme (www.kampvelebit.com). Un lugar fresco entre montañas donde, por primera vez en muchos días, tuve que dormir con manga larga y dentro del saco. Estaba encantada.

Además de poder ir con tu tienda o caravana/camper, el lugar ofrecía la posibilidad de alquilar pequeñas casas de hobbits donde alojarse.

Este hubiese sido el sitio perfecto para quedarme un par de noches si no fuese porque no traía suficiente comida conmigo y la tienda más cercana estaba a unos 20 km de allí. Lo lamenté mucho pues el cuerpo ya me pedía un descanso. Además, al comienzo de la mañana había empezado a notar una molestia en la pierna derecha que esperaba no fuese a más. Tendría que esperar a la mañana siguiente para ver cómo evolucionaba el dolor y decidir qué hacer.